La capital de Sicilia, Palermo, es parada obligatoria en el recorrido de la isla italiana. Una ciudad con historia milenaria que la ha dotado de un considerable patrimonio artístico/arquitectónico y que abarca desde restos púnicos hasta casas de estilo Art Nouveau, pasando por residencias de estilo árabe y normando, iglesias barrocas y teatros neoclásicos. Una joya repleta de piedras con historia, que es la ciudad más grande de Sicilia y unas de las más pobladas y ricas culturalmente del Mediterraneo Antiguo…
Palermo tiene un trazado poco regular, con calles estrechas, incluso las relativamente importantes como Vittorio Emanuele, con distancias asumibles a menos que pretendamos cubrir en un día lo que bien necesita un mes. Los itinerarios o rutas se pueden plantear por épocas, estilos, o simplemente por proximidad, aunque lo mejor es callejear y descubrir la ciudad a través de los tesoros que depara en cada esquina…
Uno de ellos es el Teatro Massimo de Palermo, el mayor de los teatros de ópera de Italia y el tercero más grande de Europa. Dedicado al rey de Italia Víctor Manuel II, es de gusto neoclásico y fue construido a finales del siglo XIX. Su arquitecto fue Giambattista Filippo Basile y lo terminó su hijo, Ernesto Basile. Emplazado en la plaza Giuseppe Verdi, en la parte vieja de la ciudad, sus exteriores siguen la moda neoclásica de utilizar arquitectura antigua y se sitúa elevado sobre una monumental escalera. A los laterales de ésta se encuentran dos leones de bronce con alegorías de la Tragedia y la Lírica. Sobre las seis columnas se puede leer “L’Arte rinnova i popoli e ne rivela la vita”: “El arte renueva los pueblos, y en ellos revela la vida”…
En lo alto del edificio se construyó una enorme cúpula semiesférica, su interior fue decorado por peritos pintores y dispone de alrededor de tres mil quinientos asientos…

El Teatro Massimo reabrió sus puertas el 12 de mayo de 1997 tras un largo periodo de abandono. Hoy en día tiene una gran variedad de eventos culturales: ballets con fama internacional, conciertos de opera lírica, muestras y encuentros. Y si por algo es conocido para los cinéfilos es porque en su escalinata se rodó la última escena de El Padrino III, donde se produce la muerte de la hija de Al Pacino, que interpreta Sofia Coppola…
La Catedral de Palermo surge en la más antigua área sagrada de la ciudad. Los normandos fueron los que reemplazaron la mezquita musulmana por una iglesia cristiana y en 1184 el arzobispo de Palermo, Gualtiero Offamilio, mandó demoler el edificio y ordenó que se empezara la construcción de una catedral, símbolo del poder religioso en la ciudad. En los siglos sucesivos añadiduras y restauraciones modificaron el edificio original…Esta singular catedral es un edificio de clara influencia oriental, aspecto al que contribuyen las palmeras del patio de entrada y está dedicada a Nuestra Señora de la Asunción, presentando una fusión de estilos. A la basílica bizantina original se le añadió un pórtico de estilo gótico catalán obra de Antonio Gambara en 1430, uno de los elementos más interesantes del edificio, con un tímpano con escenas de la Biblia y el escudo de armas de la ciudad, conservando también algunos elementos de la antigua mezquita…
Su interior, amplio y blanco, resulta frío comparado con el exterior. A lo largo de las paredes están alineadas estatuas de mármol de Gagini que figuran santos y en las dos primeras capillas de la nave derecha están las tumbas reales e imperiales. Entre las muchas capillas destaca la capilla de Santa Rosalía, donde se custodian las cenizas de la Santa Patrona de Palermo…
Entre 1781 y 1801 se llevó a cabo una amplia renovación del edificio y el astrónomo Giuseppe Piazzi, considerado el primer gran astrónomo italiano después de Galileo, recibió el encargo del monseñor Felipe López y Royo, arzobispo de Palermo y Monreale y presidente del Reino de Sicilia en 1794, de adornar la iglesia con una meridiana (instrumento gnomónico que permite averiguar el mediodía solar) de utilidad pública que además sirviera de ornamento al edificio…
Los Quattro Canti es una plaza octogonal situada en el cruce entre los dos principales ejes de Palermo: la via Maqueda y il Cassaro (calle hoy conocida como Corso Vittorio Emanuele, y que constituye la calle más antigua de la ciudad). El nombre exacto del lugar es Piazza Vigliena (en homenaje al virrey don Juan Fernandez Pacheco de Villena y Ascalon, duque de Escalona). Este virrey encargó al arquitecto florentino Giulio Lasso, la organización urbanística de la ciudad a través de un cruce inspirado en el de las Quattro Fontane de Roma. En 1633 se llevó a cabo la construcción de las cuatro fuentes con las estatuas representativas de las Cuatro Estaciones; La Primavera, el Verano, el Otoño y el Invierno…
La Piazza Pretoria, es una plaza situada a pocos metros de los Quattro Canti, en el centro exacto histórico de Palermo. En 1573 el Senado de Palermo compró una fuente (obra de Francesco Camilliani) que se consideró en ese tiempo la representación de la corrupción del ayuntamiento, y los palermitanos apodaron la plaza, también por las estatuas desnudas, Piazza della Vergogna (Plaza de la Vergüenza) por esta fuente situada en el centro de la misma…
La Piazza Bellini es una de las zonas más concurridas del centro histórico de Palermo. Su nombre se debe al compositor Vincenzo Bellini que estudió en el Conservatorio de Nápoles y es una de las más bellas de la ciudad porque presenta una sutil combinación de arquitectura oriental y occidental ya que en ella se alzan tres iglesias junto con el Teatro Bellini: La Martorana, San Cataldo y Santa Caterina d’Alessandria…
A 11 kilómetros de Palermo se encuentra la localidad de Monreale, punto inexcusable de visita. Su monasterio benedictino, con su majestuosa catedral y su claustro suponen la culminación del arte arabo-normando en Sicilia…
La catedral de Monreale (en italiano, Duomo di Monreale) fue fundada en 1172 por Guillermo II de Sicilia, y muy pronto, junto a ella se levantó un monasterio benedictino. El monarca impulsó la construcción de este templo ya que, según parece, tenía la idea de superar a su abuelo Roger II. La leyenda también cuenta que fue la Virgen María quien se le apareció en sueños a Guillermo para pedirle que construyera un templo en su honor a cambio de que le fuese rebelado la localización del tesoro paterno. Sin embargo, comparada con algunas de las más bellas catedrales católicas u ortodoxas, la de Monreale parece más bien austera en su fachada ya que nada hace suponer lo que se encuentra en su interior…
Y es que la Catedral de Monreale es famosa por los impresionantes mosaicos de oro que cubren todo su interior, en los que se pueden contemplar escenas tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Guillermo II tardó diez años en terminar esta joya del arte italiano de la Edad Media y en 1184 pudo descansar tranquilo gracias a los miles de kilos de oro empleados en esos mosaicos que representan escenas bíblicas. Minúsculas teselas doradas que nos ofrecen un paseo por la historia de Adán y Eva, representan vicisitudes del Arca de Noé o reflejan distintas escenas de la vida de Cristo…
Su construcción se remonta a la misma época que vio aparecer las grandes catedrales góticas de Francia y es contemporánea de la Catedral de Palermo pasando a ser declarada, en el año 2010, con los demás monumentos del Circuito árabe-normando, Patrimonio de la Humanidad…
Por último, os recomiendo la vista a Cefalú, esa localidad situada en la costa siciliana septentrional, a 70 km. de Palermo a los pies de un promontorio rocoso, donde se rodó parte de la película Cinema Paradiso (junto con el pueblo, también siciliano, de Palazzo Adriano, que en la película están unidos por la cámara del director Giuseppe Tornatore), que junto con la saga de El Padrino, es una de mis películas favoritas y que me recuerda tanto al cine de verano de mi abuelo donde tanto tiempo pasé en mi niñez...
Ahora Cefalú es uno de los mayores centros balnearios de Sicilia, que cada año atrae a miles de turistas, sicilianos e italianos en general. Tiene termas romanas, una catedral antigua, maravillosas playas y constituye una ciudad tranquila llena de historia con puerto pesquero y sede de un obispado. Su Catedral fue erigida bajo el patronazgo de Roger II de Sicilia, comenzando a construirse en 1131 y sus mosaicos también están entre los más famosos del mundo, por lo que forma parte de ese conjunto «Palermo árabe-normando y las catedrales de Cefalú y Monreale» que fueron incluidos en la lista del patrimonio de la Humanidad por la Unesco…

“La belleza es verdad y la verdad belleza -no hace falta saber más que esto en la tierra”
(John Keats)
Gracias por seguir y comentar mi blog, el próximo día os contaré mi última parada en Sicilia.
¡Que maravilla de lugares, quien pudiera estar de nuevo de vacaciones! 🙂
¡Feliz día!
http://www.luciagallegoblog.com
Q bonito ❤
Guapisima que precioso lugar!!besos